Continuando con nuestro artículos sobre las lesiones musculares, ahora os damos a conocer las lesiones articulares principales, aunque antes queremos recordarte que la valoración de una lesión siempre debe realizarse por un profesional.
Lesiones articulares
Esguinces
Cada articulación consta de una serie de ligamentos que le proporcionan, entre otras cosas, la capacidad de moverse y de hacerlo con estabilidad. Dichos ligamentos no son completamente elásticos, tienen una capacidad limitada de estirarse y si se sobrepasa ese limite no vuelven a recupera la longitud que tenía en un principio. Este alargamiento se llama distensión y si es muy violento podría llegar al desgarro del propio ligamento, pero los huesos que forma la articulación siguen manteniendo el contacto entre sí.
Síntomas
- Dolor que aumenta con el movimiento.
- Hinchazón que aparecerá bastante rápido.
- Pérdida de estabilidad y potencia en el movimiento.
Tratamiento
Por supuesto, lo primero sería acudir a un profesional para valorar el grado de esguince y realizar la inmovilización de la articulación si fuera necesario, pero como recomendaciones generales:
- Aplicar frío para reducir hinchazón.
- Elevar la zona para favorecer la circulación.
- Reposo de la articulación.
Como comentamos unas líneas arriba, después de un esguince los ligamentos no recuperan el tamaño inicial, por lo que la posibilidad de un nuevo esguince aumenta dado que ahora la estabilidad que proporcionan los ligamentos es menor. Por ello es importante acudir a un fisioterapeuta para ayudarte a ganar estabilidad de nuevo, como por ejemplo con el fortalecimiento de los músculos colindantes. En Clínica de Fisioterapia y Osteopatía Kinesia Córdoba podemos ayudarte.
Luxaciones
Este caso es similar al esguince, pero esta vez de los huesos pierden parcial o totalmente el contacto entre sí. Lo más probable es que sea fácilmente identificable dado que se producida una deformación en la articulación que puede impresionar bastante a personas aprensivas. En este caso se pueden a llegar a producir roturas en los ligamentos que forman la articulación además de producirse un desgarro capsular.
Como puedes intuir, en estos casos la atención sanitaria debe conseguirse lo antes posible y hay que procurar mantener la articulación lo más estable e inmóvil posible hasta la llegada del especialista y aplicar frío si existe la posibilidad.
El tratamiento posterior tiene que correr a cargo de un profesional por lo que ni siquiera vamos entrar a comentar recomendaciones generales.